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Alarma por escalofriantes cifras de abuso sexual infantil en Ibagué

En total, durante el cuatrienio pasado se registraron 1,135 casos de niñas y 117 de niños afectados.

Ibagué, enfrenta una situación alarmante con respecto al abuso sexual infantil, revelando cifras aterradoras y una realidad que exige atención y acción inmediata.

Según datos oficiales del cuatrienio pasado, las niñas son las principales víctimas de este flagelo, una realidad que requiere intervención urgente por parte de las autoridades y la comunidad.

Cifras que impactan

Las estadísticas proporcionadas por la Secretaría de Gobierno y la Comisaría Tercera de Familia muestran un panorama desolador. En 2020, 272 niñas y 17 niños fueron sometidos a procesos administrativos de restablecimiento de derechos, lo que implica que se confirmó una amenaza o vulnerabilidad significativa. En 2021, los casos aumentaron a 345 niñas y 11 niños; en 2022, 257 niñas y 42 niños; y en 2023, 261 niñas y 47 niños. En total, durante el cuatrienio pasado, se registraron 1,135 casos de niñas y 117 de niños afectados.

El silencio de los no denunciados

Estas cifras, aunque ya alarmantes, solo reflejan los casos denunciados. El problema se agrava cuando consideramos los numerosos incidentes que no se denuncian debido al miedo, la vergüenza o el desconocimiento de los procedimientos.

Acción política

Ante esta crisis, el concejal de la ciudad, Camilo Tavera, ha convocado a un debate de control político el próximo 15 de julio. En este debate participarán las Secretarías de Salud, Gobierno, Desarrollo Social Comunitario, así mismo fue invitado el Instituto Colombiano de Bienestar Familiar (ICBF).

El objetivo es identificar las falencias en las diferentes rutas de atención y mejorar la capacitación del personal encargado de estos casos para evitar la revictimización de los afectados.

El debate de control político convocado por el cabildante del Mira, no solo busca mejorar los mecanismos de atención y protección, sino también visibilizar el problema en los medios de comunicación y educar a las familias sobre la importancia de denunciar estos delitos.

Ibagué no puede seguir siendo indiferente ante estas cifras escalofriantes. Es imperativo que las autoridades actúen con diligencia y que la sociedad se una para proteger a los niños y niñas, garantizando su derecho a una vida segura y libre de violencia.

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