Ciudad

Habitantes de Cañaveral al límite por el incesante tránsito de volquetas de la mina El Vergel

Lo más indignante, según los vecinos, es que esta empresa tiene otras rutas alternativas para el transporte de sus materiales, como el sector de El Vergel, pero han optado por no utilizarlas.

En la urbanización Cañaveral, ubicada en la Comuna Seis de Ibagué, la vida diaria de los residentes se ha transformado en un tormento. A toda hora del día y la noche, pesados vehículos de carga atraviesan sus calles a toda velocidad, transportando material desde la mina del Vergel a Gualanday. Lo que antes era un sector  tranquila, ahora está invadida por el ruido, la inseguridad y la amenaza constante de accidentes.

Los habitantes denunciaron en  Conlaverdad.com que ya no respetan ni las horas de almuerzo ni las madrugadas. «No hay descanso. Las volquetas pasan día y noche, sin importar la hora», comentó un residente visiblemente afectado  por la situación. El deterioro de la calidad de vida es evidente, y la paciencia se ha agotado.

La empresa minera Fedeslpastos, cuenta con todos los permisos legales para la explotación de recursos en la zona, aunque las quejas sobre el daño ambiental que han causado a la reserva natural de Cañaveral no cesan. Lo más indignante, según los vecinos, es que esta empresa tiene otras rutas alternativas para el transporte de sus materiales, como el sector de El Vergel, pero han optado por no utilizarlas. ¿La razón? El costo de construir un puente vehicular en esa zona es demasiado elevado, y prefieren no incomodar a los residentes de las zonas más adineradas.

La entrada y salida a la mina se da exclusivamente por Cañaveral, lo que ha convertido a esta urbanización en una especie de corredor permanente de transporte pesado. «Parece que los ricos no deben ser molestados, pero nosotros sí podemos soportar el ruido, la contaminación y el riesgo de accidentes», dijo un líder del lugar.

El paso de estos doble troques por la urbanización no solo afecta la tranquilidad, sino que representa un riesgo constante para la seguridad vial. Estudiantes, adultos mayores y residentes en general temen ser víctimas de accidentes, ya que la velocidad a la que transitan los vehículos es alarmante. No es solo una cuestión de incomodidad, sino de seguridad.

“Ya no podemos caminar tranquilos, los niños tienen que cruzar las calles mientras estas moles pasan sin frenar. ¿Qué esperan, que ocurra una tragedia para actuar?”, expresó con frustración un padre de familia de la zona.

Ante la indiferencia de las autoridades y la empresa minera, los habitantes de Cañaveral han decidido tomar medidas drásticas. La próxima semana se anuncia un cierre de vías en señal de protesta. Los residentes exigen que se respeten los acuerdos previos que garantizaban la tranquilidad y el libre descanso, y que se busque una solución definitiva al abuso de velocidad en un sector habitado por familias y estudiantes.

El clamor de los vecinos es claro: no están dispuestos a seguir soportando los atropellos de una empresa que privilegia el lucro sobre el bienestar de la comunidad.

Publicaciones relacionadas

Botón volver arriba