
Indagarán capacidad de reacción de Bomberos tras devastador incendio en la calle 19 de Ibagué
La reacción del Cuerpo Oficial de Bomberos frente a esta emergencia está siendo cuestionada.
El reciente incendio en la calle 19 de Ibagué, que dejó a su paso destrucción y pérdidas millonarias, ha encendido no solo las alarmas de los ciudadanos, sino también las de los órganos de control. La reacción del Cuerpo Oficial de Bomberos frente a esta emergencia está siendo cuestionada, y se anuncia una investigación para evaluar su capacidad de respuesta y los recursos con los que cuentan.
En medio del la devastación causada por la conflagración estructural que arrasó con varias edificaciones en la concurrida calle 19 de Ibagué, la preocupación por la capacidad de los cuerpos de socorro para enfrentar situaciones de tal magnitud ha sido inevitable.
Eduardo Espinosa, personero de la ciudad, reveló que el Ministerio Público ha decidido iniciar una investigación sobre la reacción de los bomberos ante este trágico suceso, dejando entrever que no se trata únicamente de evaluar la actuación de los individuos, sino de cuestionar la infraestructura y los recursos disponibles para hacer frente a emergencias de gran escala.
Mientras las llamas consumían gran parte de la zona afectada, la sociedad gremial y algunos sectores ciudadanos empezaron a levantar la voz, cuestionando si el Cuerpo Oficial de Bomberos de Ibagué cuenta con los medios suficientes para enfrentar una emergencia de esta magnitud. “Valoramos profundamente el trabajo y la dedicación de nuestros cuerpos de bomberos. Sin embargo, es esencial revisar la capacidad instalada y la infraestructura que tienen a su disposición”, señaló Espinosa.
Este llamado de atención no busca desmeritar el arduo trabajo de los bomberos, sino garantizar que cuentan con los recursos necesarios para realizar su labor con la excelencia que la ciudad merece.
El personero fue enfático al afirmar que, aunque la dedicación y empeño de los bomberos no está en duda, la investigación se centrará en determinar qué fallas existen en el sistema que pudieron haber contribuido a la magnitud de la tragedia. “Sabemos que tienen las botas puestas para trazar por la ciudad, pero hay que entrar a indagar qué está pasando precisamente con los medios de que ellos deben disponer para prestar un excelente servicio”, añadió.
El funcionario anunció que se realizarán visitas al lugar de los hechos junto con la Personería Delegada. El objetivo es revisar los daños sufridos por el sector y evaluar la capacidad de respuesta que se tuvo en medio de la emergencia. Esta visita es solo el primer paso en un proceso más amplio de supervisión que buscará garantizar que Ibagué esté preparada para enfrentar futuras crisis.
Más allá de la investigación y el cuestionamiento de las capacidades de los bomberos, la atención también se centra en la recuperación económica de la zona afectada. La administración municipal, en un esfuerzo por mitigar el impacto, logró recaudar más de 600 millones de pesos. Sin embargo, Espinosa subrayó que este es solo el comienzo de un proceso que debe ser sostenido y estratégico.
“La recuperación económica no se logrará con medidas inmediatas o mediáticas, sino con proyectos a corto y largo plazo que reactiven verdaderamente la economía de estos sectores que lo han perdido todo”, indicó.
La situación es crítica, y se requiere de un plan de acción que no solo repare los daños físicos, sino que también brinde a los afectados una esperanza real de recuperar sus medios de vida.