Natagaima arde a más de 44 grados
La escasez de agua interrumpe acueductos regionales, dejando a comunidades enteras sin acceso y afectando gravemente cultivos y ganadería.
El termómetro en Natagaima por estos días alcanza los 44 grados, desencadenando una situación crítica que la alcaldesa Astrid Pava Yara, revela como una consecuencia devastadora del Fenómeno del Niño. La proximidad del municipio al desierto de la Tatacoa agrava la situación, generando problemas hídricos y estragos en la agricultura.
Astrid Pava Yara alerta sobre la expansión del Fenómeno del Niño, resaltando la falta de distritos de riego y reservorios de agua en una población donde el 80% se dedica al sector agropecuario. La escasez de agua interrumpe acueductos regionales, dejando a comunidades enteras sin acceso y afectando gravemente cultivos y ganadería.
«En este corrido del fenómeno del Niño, que inició el año pasado en abril del 2023, apenas hemos tenido lluvias en octubre, diciembre y enero. Más de 450 cabezas de ganado han fallecido, los cultivos de maíz, sorgo, limón, plátano y cachaco están severamente afectados», argumenta la alcaldesa.
Además, destaca la fluctuación preocupante del río Magdalena, vital para la región, afectando la movilidad y el transporte local. En la margen derecha, el río seca y obstaculiza el desplazamiento en canoas, afectando a 11 veredas, 14 resguardos indígenas y dos cabildos en la parte oriental del municipio.
Frente a este panorama, se plantea la posibilidad de racionamiento de agua, pero la alcaldesa subraya la necesidad de soluciones a largo plazo, como la creación de infraestructuras de riego y reservorios. Natagaima clama por ayuda y medidas concretas para enfrentar esta emergencia climática.
