Arquidiócesis de Ibagué toma las riendas del abandonado cementerio de El Salado
El primer paso para recuperar este cementerio será hacer el cerramiento para evitar posibles profanaciones, y así devolver la honra a los cuerpos que allí descansan.
Debido al avanzado deterioro que originó un problema social en la Comuna Siete de la ciudad, por cuenta de los ritos satánicos, la profanación de tumbas y la proliferación de habitantes de calle la Alcaldía, tomó la decisión de entregar la administración del cementerio de El Salado a la Arquidiócesis de Ibagué, para recuperar este camposanto que se encontraba en estado de abandono.
La ceremonia de entrega contó con la presencia de la comunidad de El Salado, donde el padre José María Russi, fue designado por la Arquidiócesis para administrar el predio, a la par de su responsabilidad en el cementerio San Bonifacio de la ciudad.
Por su parte, el padre Félix García, vicario para la evangelización, expresó su gratitud en nombre de la iglesia católica: “Primero, agradecer a Dios; y segundo, a la comunidad que confía en nuestra iglesia católica para administrar este lugar y darle la importancia que tiene el camposanto que estaba olvidado y abierto a muchas circunstancias”.
De esta manera, la Arquidiócesis aseguró que el primer paso para recuperar este cementerio será hacer el cerramiento para evitar posibles profanaciones, y así devolver la honra a los cuerpos que allí descansan. Posteriormente, se recuperará de manera paulatina el servicio como camposanto.
“Este momento quedará registrado en nuestras memorias. Por fin el municipio y la arquidiócesis se ponen de acuerdo en unificar esfuerzos y recuperar este gran patrimonio cultural y religioso”, manifestó Mario Rico, habitante del barrio El Salado.