Congresista tolimense votó en contra del proyecto de ley que reducía sus salarios
La representante a la Cámara del ‘Barretismo’, se opuso a la iniciativa.
La Comisión Primera de la Cámara hundió ayer, martes 4 de junio, el proyecto de ley que buscaba reducir el salario de los congresistas, actualmente fijado en más de $48.000.000 para el 2024.
La iniciativa, que generó grandes expectativas y debate entre la opinión pública, no logró superar su tercer debate, quedando archivada y sin posibilidad de avanzar.
La votación del informe de ponencia resultó en un desalentador 15 votos a favor, muy por debajo de los 21 necesarios entre los 41 miembros de la comisión.
Este resultado significó el fin del recorrido legislativo de una propuesta que había logrado superar con éxito las discusiones previas en la Comisión Primera del Senado y en la plenaria de esa corporación, aunque sin sufrir modificaciones significativas.
El revés en la Cámara Baja se produjo con el voto en contra de Óscar Hernán Sánchez, Piedad Correal, Karyme Cotes (Liberal), Juan Sebastián Gómez (Nuevo Liberalismo), Diógenes Quintero, Orlando Castillo Advíncula (CITREP), Jorge Eliecer Tamayo (la U), Andrés Felipe Jiménez, Juan Daniel Peñuela, Luis Eduardo Díaz Mateus, Delcy Isaza, Ruth Amelia Caicedo (Conservador), Gersel Pérez (Cambio Radical) y Juan Manuel Cortes.
Por su parte, a favor del informe positivo votaron el ponente Duvalier Sánchez, Santiago Osorio, Álvaro Rueda (Liberal), Miguel Polo Polo, Hernán Cadavid, Jose Jaime Uscátegui (Centro Democrático), Alirio Uribe, David Racero, Gabriel Becerra, Heráclito Landinez (Pacto Histórico), Jennifer Pedraza (Dignidad y Compromiso), Carolina Arbeláez, Julio César Triana y Oscar Campo (Cambio Radical), Marelen Castillo.
La sesión se caracterizó por la notable ausencia de 12 congresistas, cuyos votos pudieron haber cambiado el destino del proyecto. Entre ellos, Catherine Juvinao (Alianza Verde) quien presentó una incapacidad médica, y Juan Carlos Losada (Liberal), excusado para asistir a un curso sobre regulación del cannabis.
El archivo de este proyecto no solo representa una derrota para los legisladores que impulsaban la reducción de su propio salario, sino que también resuena como un eco del desencanto ciudadano frente a las remuneraciones percibidas por sus representantes en medio de la difícil situación económica que atraviesa el país.