
El ‘gobierno social’ de Aranda tiene aguantando hambre a los niños y jóvenes más pobres de Ibagué
Según la cabildante conservadora, la administración Aranda decidió cerrar los comedores sin presentar alternativas viables.
La alcaldesa de Ibagué, Johana Aranda, ha insistido durante más de un año que su administración es ‘la más social de la historia’. Sin embargo, la realidad en las calles de la ciudad desmiente su discurso: centenar de niños, jóvenes y adultos mayores que dependían de los comedores comunitarios sé encuentran aguardando física hambre y sin respuesta del gobierno municipal.
Sandra Varón, concejal de Ibagué, denunció el cierre de comedores comunitarios y la desatención a la población vulnerable:
«Empezamos el año con una profunda tristeza. No hay noticias sobre la reapertura de los más de 80 comedores comunitarios en la ciudad. Lo único que menciona la Alcaldía son los tres Centros Día Vida, pero estos solo atenderán a adultos mayores. ¿Y los niños? ¿Y los jóvenes? ¿Qué pasa con las miles de personas que tenían en estos comedores su única oportunidad de recibir un plato de comida al día?»
Según la cabildante conservadora, la administración Aranda decidió cerrar los comedores sin presentar alternativas viables. Antes, más de 7.000 personas accedían a estos espacios, pero ahora apenas 1.500 serán atendidas en los Centros Día Vida. Es decir, 5.500 personas quedaron sin acceso a una alimentación digna, sin ninguna solución a la vista.
«Si el único Centro Día Vida en la comuna Ocho está en La Cima, ¿cómo se supone que una persona mayor de la Ciudadela Simón Bolívar o de la comuna Siete camine hasta allá para un almuerzo? Es una decisión insensible que desconoce la realidad de la gente que más necesita apoyo», señaló la concejal.
Muchos adultos mayores, vendedores ambulantes y trabajadores informales que dependían de los comedores han quedado desamparados. Para Varón, la administración municipal ha sido indiferente: «¿Dónde están los programas sociales de los que tanto hablan? No hay soluciones ni respuestas. La Secretaria de Desarrollo Social sigue en silencio, y la alcaldesa Aranda parece más preocupada en su imagen que en la crisis alimentaria que enfrenta la ciudad.»
Mientras la Alcaldía sigue sin pronunciarse, la incertidumbre crece entre la población más vulnerable de Ibagué. La pregunta es clara: ¿cómo puede ser ‘el gobierno más social de la historia’ uno que deja a miles de ciudadanos aguantando hambre?